Klaus Nomi

Soy el tipo de persona que gusta de aquellas cosas extrañas, misteriosas y poco comunes, en los terrenos musicales se encuentra también esa loca fascinación sobre lo raro.

Una noche conversando con un hermano, este me dijo…¡¡Hey te tengo a alguien de quien podemos ser fans!! Cabe señalar que esta persona tiene tan buenos gustos musicales que sin dudarlo creí aquella aseveración.

No me dio señas ni detalles, puesto que la idea era que yo indagara por mi cuenta…
La búsqueda de aquel nombre me llevo a una imagen que tiempo atrás había visto en la web, pero que desconocía el nombre de tan extraño personaje.

Tuve la dicha de toparme con tan mágica obra de arte humana…Pero lamentablemente desaparecida. Su nombre “KLAUS NOMI”.

Klaus Nomi es de aquellos artistas que despiertan en ti un sinnúmero de sensaciones y también interrogantes, ¿que eventos ocurrieron en su vida?, que circunstancias se le presentaron para lograr ser, si no muy famoso actualmente…si un verdadero un genio.

Esas supuestas circunstancias no son otra cosa que simplemente talento, creatividad, sensibilidad y calidad musical, cosas por demás indispensables en la vida de un llamado “Artista”.

Nomi nace como Klaus Sperber en 1944 en los Alpes de Bavaria (Alemania), rodeado de una fuerte influencia musical, desde muy joven no tuvo otra afición más que la opera, esa expresión artística que lo complementaba, muy posiblemente se apartaba de aquellas cosas triviales que todo joven desarrolla, lo que de verdad le apasionaba era la opera.

Aquella pasión no terminaría en solo un gusto sino que tuvo la oportunidad de trabajar en el teatro de la Opera de Alemania y en la Opera de Berlín.

Cuando a Klaus le llego el momento de independizarse, este no dudo en mudarse a los Estados Unidos, para ser exactos a la ciudad de Nueva York. Klaus realmente deseaba algo más que un trabajo que costeara sus gastos en aquella gran ciudad, sus intenciones era destacar en lo que realmente amaba…La música.

Como sucede repetidamente en la vida de grandes artistas que buscan la gloria, Klaus tuvo que iniciar en trabajos quizás no muy gratificantes para personas que rehuyen de lo común, uno de los empleos que se cree que tuvo fue el de pastelero y chef, pero al paso de un tiempo la vida le cambió a Klaus.

El supo estar en el lugar y en el momento indicado, tal vez muchos dirán suerte, muy seguramente esa perseverancia lo llevo a realizar todo aquello que anhelaba de una manera muy peculiar.

En 1976, comienza a tener presentaciones en pequeños lugares y de la mano las relaciones sociales, comenzó a mostrarse como un verdadero artista, su forma de cantar era y es única, tenia la habilidad de cantar como soprano y tenor simultáneamente, de hecho el afirmaba sentir en algún momento envidia de las soprano, pues aparte de admirarlas deseaba ser una de ellas.

Escuchar lo que provenía de su ser, te hace pensar y creer que dos personas son las que realizan tal trabajo, pero increíblemente Klaus crea toda esa magia musical.

Nomi tuvo que recurrir a otra de sus fascinaciones para auto crearse, para complementar su prometedora carrera. Fanático de la ciencia ficción utilizo el nombre de la revista OMNI para crear el nombre que lo llevaría a la inmortalidad.

Para 1976, año en que conoció a su maestro de canto de nombre Ira Siff , tenía todo un concepto muy fuera de este mundo, era innegable la influencia que recibía de esta creencia en Ovnis y extraterrestres, pues su indumentaria e imagen lo hacían parecer un verdadero ser de otro planeta.

De las mejores cosas que le ocurrieron a Klaus fue sin duda conocer a David Bowie, no solamente fue un contacto visual como un fan a su ídolo, mas bien se trato de la mas memorable unión de dos grandes, podriamos deducir que Bowie vio el potencial que traía Klaus o quizás lo admiro en algún momento, pero lo que si es seguro fue que después de invitarlo a participar en los coros en el programa “Saturday Night Live” las cosas ya no volvieron a ser iguales para Nomi.

Todo lo que vendría después resulta tan agitado, tan fabuloso, mágico y tristemente trágico. Klaus graba su primer disco homónimo y su música comienza a tomar fuerza de verdad.

Se desprende de sus interiores obras magnificas como “The Cold Song” y comienza a gestarse un estilo muy único, el fue quien tuvo la gracia de unir al pop y la opera de forma magistral, aunque parezcan géneros muy alejados entre si, oír temas como “Total Eclipse” o “The Simple Man” hacen dudar sobre toda inconsistencia, ofrece la idea de que solo un genio pudo tener tan brillante idea. La música es envolvente y extravagante, propia de un ser como el.

1983

Yo sigo pensando que la vida es muy compleja y que pone las cosas en su lugar, la realidad esta ahí esperando ser cambiada por algún factor sea bueno o sea que altere el orden de las cosas.

Klaus Nomi estaba ahí listo para devorarse al mundo, pero el mundo que esta en constantes cambios traía consigo algo nada agradable…Eran los recién 80s y entre luces, maquillajes y el glamour que le caracterizo se gestaba algo desconocido que amenazaba con consumirles.

Klaus Nomi enfermaba de una extraña enfermedad llamada en ese entonces como Sarcoma de Kaposi, algo nuevo para los médicos que veían como su sistema inmunológico llegaba al colapso, y sin nada que lo pudiera remediar.

Algo que ni las distancias ni inclemencias de la vida pudo frenar a Nomi, el SIDA lo concluyo, lo trato de envolver con la cara de la nueva década.

Klaus Nomi cierra sus ojos a este mundo entre tantas incógnitas por su muerte, entre un fastuoso funeral y las locuras de sus seguidores que hurtan parte de sus pertenencias, solo para llevarse consigo un pedazo de Klaus Nomi.

No quiero fantasear pensando en lo que pudo haber logrado Nomi si no hubiese muerto, esta es la vida de un Klaus vanguardista, lo que le caracterizo, no pudo haber sido de otra forma, este es el modo de morir de una estrella que dejara esta tierra para brillar eternamente, eso es Klaus Nomi…Arte, pasión, glamour y tragedia.